LA MAGIA DE LOS SENTIMIENTOS

LA MAGIA DE LOS SENTIMIENTOS  04-11-2019

No nacemos solos, venimos al mundo marcados por el destino, con una familia impuesta a la que aprendemos a querer y hacemos que ese arraigado sentimiento nos acompañe toda la vida. Luego si somos afortunados formamos nuestra propia familia y nos sentimos plenos de felicidad al mirar cómo crecen y alcanzan sus propios logros, haciéndonos sentir que nos aman como nosotros a ellas o regalándonos el amor de convertirnos en abuelos. 

Me siento orgullosísima de mi familia, y aunque siempre eché de menos una hermana, tengo el mejor hermano del mundo y dos primanas para darles y recibir ese cariño huérfano.

A lo largo de la vida, vamos también acuñando buenos amigos y conocidos; guardamos como tesoros amistades que aportan las mejores enseñanzas, nos hacen reír, pero no se ríen de nosotros. Nos ayudan, nos animan y siempre que se cruzan en nuestro camino, aunque sea por breve tiempo, nos hacen felices. Otras veces el destino no acierta y nos pone al lado de personas equivocadas. Gente que pasa a nuestra vera, convive casi piel con piel disfrazados de amigos, pero no surge la magia necesaria. Tratas de hacerte ver, de dar todo lo que tienes para agradar, para hacerte querer y forjar verdaderos sentimientos de cariño, lealtad, amistad y respeto. Crees haberlo logrado, pero sin saber cómo y por qué te das cuenta que lo único que conseguiste fue captar su atención mientras estaban obteniendo beneficio de tu presencia en sus vidas.

Son cariños egoístas que te usan como un niño a su juguete y como un niño, se cansan de ti y te arrinconan para no querer jugar contigo nunca más. Da igual el daño que te causen, y si arrinconarte no les pareció suficiente, te pisotean para hacerte aún más daño.

Sufres mucho porque no entiendes cómo pudiste equivocarte al elegirles. Tras un tiempo, te recolocas y olvidas; si te cruzas con ellos te alegras al comprobar que ya no te hace daño, les miras, sientes lástima por ellos y lo único que deseas es no haberles conocido nunca.

Por el contrario, de pronto el destino quiere enmendar su error, emplea sus artimañas para encontrar momento y lugar insospechados y escribe para ti la magia de los sentimientos para unirte de forma casi impensable, con personas que compensan. Una sola vale por todas las que te arrinconaron. Te salvan, te hacen creer en ti, te valoran mucho más de lo que tú mismo imaginas que vales.

El día que esos caminos convergen en uno, sabes que esta vez no te has equivocado. Que por lejos que estemos puedes sentir su cariño y la amistad se convierte en lazos más fuertes que los que te dio la sangre.

El destino fue generoso conmigo y por lo que me quitó, me compensó con creces.

Me dio hermanas de cariño, hermanos de admiración, cuata de ilusiones, tatas de vida, que llenan la mía; comparten conmigo y yo con ellos, risas, llantos, aficiones, confidencias y das gracias al destino por el acierto y hoy envío besos al Cielo para quien en ello tuvo tantísimo que ver.

Ahora me toca sentir la misma felicidad que siente mi tata gaditalaejana.

Hace nueve años compartí contigo la ilusión de ser abuela y hoy soy quien recibe de tu mano la gran noticia: nuestro muchacho nos hace a ti abuela y a mí tía abuela ¡¡Qué ilusión tata!! ¡¡Qué alegría tan grande!!

Aún no te imaginas de verdad la gran felicidad que se te avecina. Ese niño hará reír tu mirada, va a llenar de amor tu vida, de ilusiones tus mañanas y de sueños felices tus noches.

Será la luz que te hará ver el final del largo túnel, el aire que te hará respirar por fin sin presiones en el pecho. Es la recompensa a todos tus sacrificios, desvelos y esfuerzos al límite.

Desde que te conocí de esa forma casi sobrenatural que juntó nuestros caminos en uno, las dos sabemos lo que significa tener a alguien espejo de una misma, en forma de ver la vida teniendo la seguridad que sin hablar nos entendemos y que pase lo que pase, seremos siempre las mejores amigas; sin traiciones, sin absurdos malentendidos, sin que la distancia separe, teniendo siempre la palabra adecuada, la que quieres oír y la que necesitas escuchar. La crítica que te abre los ojos para entender que no siempre tenemos razón, o apoyo si la razón es nuestra.

Mi querida Luz Casita, esperaré ansiosa el día de mayo donde pondremos juntas en las andas de la Virgen que amas, a ese niño precioso que está en camino.

Felicidades abuelita Mariluz. Enhorabuena sobrino, porque vas a ser el mejor papá del mundo.