HASTA SIEMPRE CAPITÁN VENENO

HASTA SIEMPRE CAPITÁN VENENO 

17-05-2019

Mi querido capitán, aún sin poder recuperarme de la noticia de tu partida, quiero que mis humildes palabras te acompañen en la despedida.

No soy quien para infiltrarme entre todo aquel que hoy te llora. Permíteme que lo haga a solas igual que escuché siempre todas tus agrupaciones, arrastrando el polvo de los años en vídeos y audios que en directo no escuché porque llegué muy tarde al carnaval.

Escribo con la música del Capitán Veneno de fondo, con el corazón encogido y sin palabras para despedirte de la forma que merece el gran autor que hoy se va; con las lágrimas de aficionada que disfrutó con el carnaval que has mostrado al mundo.

Grande Capitán. Grande en letras en música y en tipos que te dieron gloria y sinsabores cuando las injusticias salpicaban tu trabajo.

Tu pasodoble, ahora sí, será interminable, tanto como lo es el vacío que dejarás en el carnaval de tu Cádiz.

No tuve la suerte de conocerte en persona, pero sí vi a tu Capitán Veneno en el Falla y en el Palillero. Desde entonces comencé a tomarles gusto a las comparsas y me hice incondicional de las tuyas.

Cada carnaval te seguí desde este Valladolid falto de humor y de esa ironía que destila Cádiz.

Será casualidad, pero este año, desde que acabó el concurso, casi cada tarde he rebuscado y degustado tus antiguas chirigotas y comparsas…

Me quedo sin palabras para decirte todo lo que me hacen sentir esos trocitos de carnaval.

Tu hijo sabrá que su padre es el más grande, aunque tenga que conocerte como tantos aficionados: a través de los vídeos añejos.

Ojala fuera premonitorio el final del estribillo de “La Banda del Capitán Veneno” y el veneno de su amor te devolviera la vida.

Seguiremos esperando ver levantar el telón de un Falla que ahora indiscutiblemente te rendirá pleitesía. Soñaremos con ver levantar ese telón para disfrutar de tus comparsas o chirigotas.

Descansa en Paz. Has regalado muchas risas, mucha alegría, muy buena música, letras inimitables y mucha ironía del gran genio que siempre serás.

Eras un mito vivo, Ahora eres un mito eterno.

ESTRIBILLO

Capitán

Tu veneno secreto soy yo

Es verdad

Y el capitán respondía

Pero si el veneno de tu amor

Llegará hasta a matarme un día

Esos venenos que llevo dentro de mi corazón

Ay me devolverán la vida

CUATRO EN UNO

CUATRO EN UNO  06-05-2019

Días de mucho vísperas de nada… Así reza un refrán añejo, y aunque en este caso no es del todo verdad, porque el mes de Mayo en esta familia viene cargado de celebraciones, sin duda el de ayer, fue un grandioso día para recordar.

Todo el mundo que le apeteció o pudo, celebró el día de la madre, nosotros además celebrábamos que nuestro yerno David se metía de bruces en la cuarentena.

También celebrábamos el 5 de mayo recordando con todo nuestro amor que mi padre se marchó para dejar de sufrir y continuar su camino hecho estrella. Una estrella que ilumina mis noches y que sigo amando y extrañando cada día.

La cuarta celebración y no menos importante, fue la de las bodas de Diamante de mis tíos Chus y Pedro y que como todos pudisteis leer, se cumplieron el pasado día 2.

Así, con todo ello, para mí fue un día grandioso porque pude compartirlo con todas las personas importantes de mi vida. Tan sólo me faltaron tres grandes amigas (ellas saben quienes son) para que hubiéramos “estado todos”.

Desde que amaneció, estuve recibiendo bonitas sorpresas, primero de mano y sonrisa de mi marido, luego la comida con mi familia, que son lo más grande que tengo. Estar con mis hijas, mis yernos y mis nietas, me da fuerza para continuar respirando cada día. Notar su amor incondicional, ver sus caras de ilusión cuando nos juntamos, las risas, las carcajadas, recibir sus abrazos y arrumacos… Me dan la vida.

Durante la comida recibí preciosos regalos de incalculable valor sentimental: Unos preciosos pendientes, un mueble decorado por mi hija Laura, donde guardar mis cositas, me hizo mucha ilusión y un Marcapáginas metálico grabado con sendos dibujos de mis nietas y las dedicatorias de ambas: “abuela te quiero”, que me emocionó al máximo. En el reverso una inscripción preciosa.

A quienes os gusta leer más allá del título de las publicaciones que comparto, hace unos días tuvisteis oportunidad de leer “Las hojas de mi cuaderno” y aludiendo a esa carta, en la inscripción del reverso de mi regalo se puede leer: “Que este MARCAPÁGINAS sea tu guía. Para que NUESTRA MEJOR ESCRITORA, nunca acabe de escribir su cuaderno… Te queremos”.

Lógicamente acabé llorando inevitablemente. Me encantó y me sigue emocionando leerlo y ver mi precioso mueble.

Tras nuestra sobremesa, nos acercamos a felicitar a los “novios” y a su “acompañamiento” de día y vida.

Mi querida tía Chus emocionada no paraba de saludar y atender a sus invitados… ¡¡Qué bonita es!! Pedro aparcó sus achaques y estaba pletórico.

En la fiesta pude estar un buen rato junto a mis Primanas, sus maridos, sus hijos, sus yernos… y pude charlar y reír un buen rato con mi hermano, que aunque las ocasiones de vernos, no son demasiadas, aprovechamos cada segundo que estamos juntos para disfrutarnos todo lo que podemos.

Cuando llegué a casa, estaba pletórica, inmensamente feliz. Había tenido todo lo que podía desear en un solo día.

Gracias a todos los que hicisteis posible que se convierta en inolvidable.

BODAS DE DIAMANTE PEDRO-Mª JESÚS

BODAS DE DIAMANTE PEDRO-Mª JESÚS 

         02-05-1959    02-05-2019

¡¡Quién os lo iba a decir aquel 2 de Mayo del siglo pasado!!

La primavera de 1959 despertó para veros vestidos de novios, ilusionados, enamorados, nerviosos y rodeados de familiares y algunos amigos.

La cosa no daba para grandes gastos, pero el señor Ruperto y la señá Felisa, casaban “como Dios manda” a la niña de sus ojos y tiraron la casa por la claraboya del sobrau para celebrarlo.

Todos los convidaus recibieron la invitación con filo dorado que aún conservo intacta, ahora con color amarillento y olor a cajón.

Si observamos las fotos de ese día y contamos, pocos quedan del acompañamiento y los que quedamos, ya no somos ni sombra de lo que éramos, aunque algunos, con el tamaño adquirido, ahora demos sombra para cubrir un merendero.

Yo soy esa pequeñita regordeta de la primera fila y mi hermano el niño guapísimo con cara de tímido y pantalón blanco que está justo a mi lado.

¡Vivan Los novios! ¡¡Qué guapos los novios!! Mi tía Mª Jesús con 22 añitos y una cara preciosa, se unía con Pedro, el único varón entre sus  seis hermanas “Parrondas”.

Una pareja perfecta nacidos ambos en familias humildes, aunque muy grandes de corazón y sentimientos.

Se conocieron y decidieron unir sus vidas para siempre y a fe, que lo están cumpliendo.

Hoy 60 años después de aquel 2 de mayo, seguís rodeados de la familia: de la vuestra, de la que os venía de serie y de todos los amigos que acompañan vuestro camino. ¡¡Así da gusto cumplir y celebrar  acontecimientos!!

Sobre todo, da gusto veros rodeados de la familia que los dos formasteis: mis queridas Primanas Feli y Charo, herederas de vuestro gran corazón y que os han dado dos hijos maravillosos y cuatro nietos preciosos, orgullo de sus padres y sus abuelos.

No fueron pocas las dificultades que os presentó la vida durante estos 60 años de matrimonio, pero como dos robles fuertes, las salvasteis todas tomados de la mano para seguir en pie y amándoos (no como el primer día, que como texto queda muy bonito, pero si lo pongo me llamarían mentirosa y no lo fui nunca). Si no os amáis como el primer día, porque los años dejan canas y arrugas pero se llevan la pasión; ahora os queréis mucho más que nunca y eso es lo más importante.

¡¡Qué haríais el uno sin el otro!! ¡¡No hay ninguna prisa por saber la respuesta!!

Me hace muy feliz saber que sois felices. Compartir un ratito de vuestra felicidad y compañía será una gran alegría.

Mi querida tía Chus; como bien dices: “mi segunda mamá”. El hombro en el que lloré y reí. A quien confié mis sentimientos más que a nadie en los años en que tanta falta me hizo ese cariño.

Ahora esas confidencias lo son con mis Primanas, por edad y por ley de vida, pero que no te agobie con mis cosas, no quiere decir que te quiera menos, mi Chus preciosa y admirada. Mi ejemplo a seguir como mujer y como persona.

Mis queridos tíos Chus y Pedro, os deseo toda la vida juntos y tan felices como merecéis, ¡¡que es mucho!!

Un abrazo muy fuerte (sin apretar demasiado que tampoco tenemos fuerza para tanto y los huesos se chascan por cualquier tontería).

Millones de felicidades y ahora a por las Bodas de Platino que son a los 65.