viernes, 24 de abril de 2020

FELIZ CUMPLE CONFINADOS


FELIZ CUMPLEAÑOS CONFINADOS VIDA MÍA  24-04-2020

Mi querida hija mediana: Quiero desearte un muy feliz cumpleaños. Sea como sea, hoy los cumples en la plenitud de maravilloso ser humano que tuve el honor y la suerte de parir para disfrutar de tu vida y estar orgullosísima de ser tu madre. Mi niña preciosa y extraordinaria que me regalaste además las dos maravillosas nietas por las que ahora mismo daría mi vida casi casi como la das tú.

Ya ves, el día que nos obligaron por nuestro propio bien a confinarnos en casa, nos dijeron que serían 15 días y aunque no se lo creían ni ellos, sabíamos que serían muchos días más, porque el bichito es terco y escurridizo y porque ya veíamos que la estaba liando gorda en todo el mundo, por eso nosotros, españoles, tan solidarios, no íbamos a quedarnos sin participar como los que más en ese problema mundial.  ¡¡Quihacer!!

¡¡Cómo íbamos a dar!! Sí, a dar que llegaríamos al día de tu cumpleaños y aun no tendríamos permiso para salir libremente de nuestras casas, mucho menos imaginaba que el día de tu cumple, aún no sabríamos cuándo ni cómo se va a producir nuestra ansiada libertad.

Mi niña preciosa, me siento muy orgullosa de ti -SIEMPRE- tu eterna sonrisa y ese corazón de oro que muestras desde el día que naciste, pero ahora, me siento orgullosa de cómo te enfrentas a ésta locura escondiendo tus temores para no dar a ninguno de nosotros ni un segundo de preocupación.
Trabajas porque eres de los sectores imprescindibles, pero al llegar a casa, te desprendes de los miedos para entrar en ella siendo la mami maravillosa que tus niñas esperan con los brazos abiertos.
Luego, en vez de poder descansar cuerpo y mente, te entregas por completo a disfrutar de tus preciosas hijas, poniéndote en la piel, no ya de la mejor mamá del mundo, tienes que ponerte en la piel de profesora sin haber estudiado para ello, ni tener preparación académica, debes ayudarles con sus deberes que han de hacer en casa convertida en aburrida aula sin amiguitos ni recreo y eso no hay maestro ni decente ni docente que lo hubiera aguantado, por muchas medallas que algunos ahora se ponen diciendo: “ahora nos valorarán los padres”… Pues no, porque os están dando unas responsabilidades que ni ellos tienen durante toda su carrera. Los profesores nunca han estado 24 horas al día, dos meses sin salir del aula, con niños que tampoco salen de ella.
Te dan unas tareas que deben hacer vuestras hijas, pero en muchos casos no dan las soluciones para poder comprobar si en verdad lo están haciendo bien, y en muchos casos son temarios que no tenéis la obligación de saber, porque como digo, no sois profesores. Sois valientes.
Sin tregua para el descanso y mucho menos para el desaliento, inventas (o inventáis David y tú) juegos para entretener a las dos campeonas niñas que tenéis la suerte de abrazar y besar todos los días y cuanto necesitáis.

Ellas son para vosotros lo más maravilloso e importante. Quizás los ánimos y las fuerzas no están para juegos, pero hay que entretenerlas.
Son unas campeonas y merecen premios por soportar tantas horas sin poder salir de casa.
Ellas saben lo que ocurre, y aunque no lo entienden, cumplen el confinamiento como jabatas siendo responsables y divinas como lo son en todas las facetas de sus pequeñas vidas.

Hoy es tu cumple amor, no estaremos juntos, no habrá tirones de orejas, ni abrazos, ni besos, ni regalos en mano. Hoy no tendrás que haber estado varios días preparando comida,  meriendas e incluso tartas o galletas, adornado el salón… Ah no, el salón sí lo habéis adornado porque la fiesta ha de celebrarse, quizás diferente, pero fiesta para ti amor mío con tu maravillosa familia. La que habéis formado vosotros.

Eres tan preciosa, que merecías que nos saltáramos el confinamiento, y corriéramos –como si es a pie- a Cabezón para estar a tu lado, para decirte cuantísimo te queremos, darte algún regalito que lo mismo ni te gusta o no te vale y después de merendar, dejarte todo tirado y ahí te las apañes…
Mi vida, mi princesa adorada, no te puedo decir cuantísimo te quiero; cuánto echo de menos tus abrazos pancita con pancita. Tus besos divinos que saben a cielo y huelen a Gloria de Cacharel…

Este cumpleaños sin duda va a ser muy diferente a cualquiera de los 37 que celebramos juntas. Pero lo único que será exacto, es el amor que tengo guardadito para el día que por fin, pueda entregártelo en cuerpo y alma.

Te adoro princesa. Te quiero infinito.

FELIZ CUMPLEAÑOS… FELIZ VIDA… SALUD Y LIBERTAD AMOR MÍO

2 comentarios:

María y Manuel dijo...

¡Qué pluma tienes Marisa hija!
Os deseo felicidad para ella, para ti y para el que la gestó.
Os quiero
Besos

Marisa Pérez Muñoz dijo...

Muchas gracias chipioneros de mi corazón.
Un abrazo eterno de 2 a 2

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