QUERIDOS REYES MAGOS DE
ORIENTE 05-01-2013
Queridos Melchor Gaspar y
Baltasar: Pese a que hay quien se empeña en mentirme y obligarme a creer que no
existís; que soy tonta por creer en vosotros; yo sigo fiel a lo que me
enseñaron mis padres y mis abuelos y cada noche del 6 de Enero, pongo mis
zapatos limpios a la entrada de mi casa esperando vuestra llegada.
Majestades, he de decir que no siempre me traéis lo que os pido (más bien nunca), pero como soy una “niña” buena, os perdono porque nunca dejasteis mis zapatos vacíos (gracias a la ayuda que tenéis con mis niñas, ellas siempre me sorprenden y os piden para mi cositas que me gustan).
A vosotros no se os pueden pedir ni salud, ni dinero, ni amor, ni trabajo; y mucho menos que regresen las personas queridas que se fueron para siempre… sólo podéis conceder esos deseos materiales: colonia, zapatillas… o incluso algún que otro artilugio electrónico tan de moda en los últimos años; por eso no os pediré imposibles y sí quisiera pediros que este año me traigáis la alegría de saber que ningún niño deja de creer en vosotros. Que a ninguno le falte nunca la magia y la fantasía, porque sin ilusión el mundo sería un caos aun más tremendo.
Majestades de Oriente: De antemano os doy las gracias por lo que me vayáis a dejar esta noche y os deseo un feliz viaje de regreso a vuestras lejanas tierras.
Majestades, he de decir que no siempre me traéis lo que os pido (más bien nunca), pero como soy una “niña” buena, os perdono porque nunca dejasteis mis zapatos vacíos (gracias a la ayuda que tenéis con mis niñas, ellas siempre me sorprenden y os piden para mi cositas que me gustan).
A vosotros no se os pueden pedir ni salud, ni dinero, ni amor, ni trabajo; y mucho menos que regresen las personas queridas que se fueron para siempre… sólo podéis conceder esos deseos materiales: colonia, zapatillas… o incluso algún que otro artilugio electrónico tan de moda en los últimos años; por eso no os pediré imposibles y sí quisiera pediros que este año me traigáis la alegría de saber que ningún niño deja de creer en vosotros. Que a ninguno le falte nunca la magia y la fantasía, porque sin ilusión el mundo sería un caos aun más tremendo.
Majestades de Oriente: De antemano os doy las gracias por lo que me vayáis a dejar esta noche y os deseo un feliz viaje de regreso a vuestras lejanas tierras.
3 comentarios:
Estoy completamente de acuerdo: "sin ilusión, el mundo sería un caos...aún mayor" El perderla, es lo que nos lleva a tremendos disparates. Saludos cordiales querida amiga, y felices reyes jejeje
Felices Reyes para tí también Julio.
Un abrazo
Pobre mi querida amiga. Ningún niño debería tener una mala infancia. La única época de la vida sin preocupaciones ni problemas... ojala existiera de verdad la magia para que todos los niños fueran felices.
Un abrazo María y achuchones a Manunel. A los dos, de veras... Feliz vida, porque lo merecéis.
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