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31-01-2009
Me gustaría comentar algo que como aficionada al carnaval gaditano me afecta.

Sobre la cuidad de Cádiz habría mucho que opinar, bueno o no tan bueno. Dejaré que otros lo hagan, porque, aun sabiendo que Cádiz no es sólo su carnaval, es precisamente de esta fiesta mundialmente conocida sobre lo que quiero hablar.
Acabo de leer una noticia que me ha hecho saltar del asiento con ganas de aporrear la conciencia de los culpables.

El carnaval de Cádiz lleva celebrándose muchos años y es evidente que gracias a la televisión y aun más a Internet, conocemos y amamos esta ciudad quienes nacimos muy lejos del Pópulo, La Viña, El Mentidero… y tantos barrios, plazas y callejuelas carnavalescas de “Cádi, Cádi”.

Cierto que los foráneos aficionados a su carnaval, no pagamos en esta ciudad impuestos que llenen los bolsillos de quien ahora pretende matar la gallina de los huevos de oro, pero sí compramos los CD de las agrupaciones que nos gustan y hablando con entusiasmo del arte y el duende gaditano, contagiamos a la gente de nuestra tierra, la ilusión que nos produce el carnaval de Cádiz; de esta forma también contribuimos a difundir gratuitamente su arte.

El carnaval de Cádiz, es de Cádiz y de todos los gaditanos. No creo que nadie piense que por sentirnos identificados o aficionados a esta magnifica fiesta, intentando robarles ese derecho, cuando sólo pretendemos aplaudir y disfrutar ese arte que atravesó fronteras, y agradecer a quien lo difundió y ayudó a engrandecer su fiesta y su ciudad.

Mi afición por el carnaval gaditano es nueva, mi primer contacto fue en 2001, gracias a “ONO” y a “andalucía tv”.
He llegado a “empaparme” tanto de carnaval, que seguramente se de él más que algunos gaditanos no vinculados a su propia fiesta. Aunque jamás podré equipararme –ni lo pretendo- con los mínimamente entendidos.

Gracias a http://carnaval-tv.es/ http://teatrofalla.blogspot.com/ y a algún que otro portal más de Internet, he podido ver el carnaval de años atrás y por culpa también de ese “veneno” carnavalero, me animé –no sin esfuerzo- a vivir dos años el carnaval en las calles de una ciudad que me era completamente ajena antes de 2001, y ahora siento que para siempre formará parte importante de mi vida.

La cadena local que está emitiendo el concurso en su fase de preliminares, y que tanto parece defender el “interés” de los autores, ha lanzado veto y denuncia a quienes emitan las imágenes del concurso en el teatro Falla 2009 que ellos al parecer compraron y la de otros años que ya ni recuerdan si compraron o si les salió rentable emitir.

Puede que estén en su derecho, no lo dudaré, pero si dudo que realmente hayan pensado en los intereses de los autores carnavaleros, verdaderamente perjudicados por la medida que parece han tomado en dicha cadena.
Para los autores imagino que será también importante que se les conozca y se les aprecie, tanto o más que embolsarse unos cuantos euros, ya que ellos donde realmente pueden ganar dinero es en sus actuaciones en directo y si los contratos les salen en gran medida para fuera de Cádiz, es porque les conocemos por verles retransmitidos.

No todo el mundo puede ver en directo las sesiones del concurso de agrupaciones que se celebran en “El gran teatro Falla”, pero sí somos muchos los que lo vemos grabado en http://carnaval-tv.es/ tantas veces como queramos.

Seguir los carnavales por la radio: bien, pero las emisoras andaluzas no llegan al resto de España, mucho menos a tantos lugares como llega Internet.
Tampoco la radio es el mejor medio; aunque no dudo que en otra época fuera el mejor o el único.
Del carnaval, importantes son la música o las letras; tanto o más lo son las puestas en escena y “los tipos” que nunca pudieron “verse” por la radio.

Cádiz, es tacita por pequeña y por bonita, y si se hizo tan grande, algo habrá tenido que ver la difusión de su carnaval por los modernos medios audiovisuales de que disponemos.

Este año, desde que empezó el concurso y supe que podría verlo a través de Internet, en directo, gracias a la cadena local que adquirió los derechos; me he pegado a la pantalla del ordenador quemándome no sólo las pestañas intentando no perder detalle de lo que me ofrecía esa pantalla pequeñita (o más grande y con peor calidad de imagen), pero no sólo me quemo las pestañas, también los nervios por la cantidad de veces que se corta el audio, el video o las dos cosas a la vez. Aún así, mi afición puede más y me quedo hasta el final de las sesiones, aunque algunas agrupaciones no las ven ni sus familiares, pero así es el carnaval y si gusta, gusta con todas las consecuencias.

Si a partir de ahora los portales de Internet que lo hacían, no van a poder “prestarme” los videos o audio de las actuaciones que más me gusten, tendré que conformarme con ver las semifinales y la final que Andalucía televisión me ofrecerá y podré grabar en mi viejo VHS, para poder mirarlo cuantas veces quiera o… ¿también está prohibido que lo grabe para mi uso y disfrute?

Si no le ponen freno a esto, seremos muchos los que saldremos perdiendo; y digan lo que digan, las primeras que perderán con esto van a ser las agrupaciones, que se dejan la piel en los ensayos, en las tablas del Falla, en las calles y plazas de su adorado Cádiz, y en todo rincón español donde son requeridos.

Por esa regla absurda, me planteo: ¿van a hacer pagar canon a las agrupaciones que utilizan las músicas de otros autores a las que cambian las letras en los repertorios? ¿Cambiarán las normas a la mitad del concurso en esto también?