19-08-2018
Querida
Tere: El destino se ha equivocado de nuevo creyendo que poniendo otra piedra en
tu camino vas a rendirte ¡Bien le venía! No sabe lo fuerte, lo valiente y
luchadora que eres Sebi.
Ya
demostraste una vez que si la vida te declara la guerra, tú vas a ganar todas
las batallas por duras que sean.
También
demostraste que no hay quien pueda borrar tu sonrisa, apagar tu risa, ni mermar
tu férrea voluntad para seguir llenando el pueblo con tu voz cantarina, ni de
plagar las noches de verano en la placita con esos chascarrillos que hacen que
a tu lado no exista la tristeza.
Doy las
gracias a la vida que un día puso en mi camino a Pablo y Jose, como los dos
grandes amigos que han demostrado ser. Gracias a esa bonita y gran amistad con
tus hijos, pude conocerte de forma bien distinta a como te conocía desde
siempre. Dejaste de ser “una chica de mi pueblo; la mujer de Teodoro el de la
trompeta”, para ser una gran persona que tener en mi vida.
Supe que
eres generosa, dicharachera, amable, gran mujer, excelente persona, agradecida,
siempre dispuesta a hacer favores sin pedir nada a cambio…
Jamás
volviste la cara al cruzarte conmigo haciéndote la desentendida… Al contrario,
si no te veo, llamas mi atención para saludarme y si el tiempo no lo impide, charlar
un ratillo.
Con esta
carta, te envío fuerza, mucho cariño, ánimo y energía positiva para seguir
superando todo lo que esté por venir.
No te
canses de luchar, así el destino se cansará de ponerte trabas.
Un abrazo
muy fuerte…
Tu amiga:
Marisa Pérez
2 comentarios:
Hola Marisa, veo que aun sigues con tu estupendo blog. Saludos
Hola Julio. Parece que Google perdió la costumbre de enviar avisos al correo cuando hay algún comentario para moderar y acabo de ver el tuyo.
Sí, continúo con mis aficiones. Espero que tú sigas con las tuyas, y también con la de leerme.
Un abrazo!!
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