miércoles, 11 de mayo de 2011

A LAS BUENAS GENTES DE MEDINA DEL CAMPO

A LAS BUENAS GENTES DE MEDINA DEL CAMPO  11-5-2011

Quisiera desde aquí dar las gracias a las buenas gentes de Medina del Campo que el pasado día 5 socorrieron a mi madre cuando se enteró en plena calle de la triste noticia del fallecimiento de mi padre –su marido-.
No puedo saber ni sus nombre, ni el lugar exacto donde ocurrió, pero mi madre, ya mayor, pues tiene 81 años, recibió una llamada telefónica avisando del suceso.
Al parecer sufrió un ataque de ansiedad y nervios y fue atendida por varios transeúntes que cariñosamente trataban de consolarla y socorrerla.
Un joven que viajaba en una furgoneta blanca, sin conocerla de nada, la llevó en el vehículo hasta la residencia donde se hallaba mi padre. No se conformó con dejarla en la puerta, la acompañó dentro y hasta que no la dejó en compañía de los cuidadores del centro, no se marchó.
Mi madre ahora tiene mucha pena por no haber podido dar las gracias a estas buenas gentes que la ayudaron en tremendo trance y he pensado que este podría ser bueno; Si alguien hubiera oído relatar el suceso podría darles a conocer que estamos muy agradecidos por su noble gesto.
Asimismo también en mi nombre y en el de mi hermano, mi madre, mi cuñada, mi marido, mis hijas y yernos, queremos agradecer al centro geriátrico asistencial “La Residencia de Medina” sito en C/ Isabel La Católica Nº 3 de Medina del Campo, el trato amable y cariñoso que mi padre recibió en sus dos días de interno y las atenciones dispensadas a mi madre cuando llegó al centro acompañada por el joven de la furgoneta blanca el día 5 cuando mi padre acababa de fallecer.
Gracias de todo corazón a las buenas gentes de Medina del Campo y al personal de la residencia. Allí, ante la imposibilidad de hacerlo personalmente,  y con inmensa tristeza y en idéntica medida  tranquilos y confiados, ingresamos  a mi querido padre, sabiendo que los brazos de ese personal eran los idóneos para que él estuviera perfectamente atendido los meses o años que en posible estado vegetativo le quedaran de vida.
Desafortunadamente tan sólo dos días después del ingreso, el corazón –ya muy gastado de mi padre- dejó de latir.
Gracias de corazón por todo.

domingo, 8 de mayo de 2011

MIS MÁS SINCERAS GRACIAS

Esta es sin lugar a duda, la foto que más me gustó siempre de mi padre
MIS MÁS SINCERAS GRACIAS   7-MAYO-2011

Al igual que os comuniqué desde este Blog su fallecimiento, ahora también desde aquí quiero daros las gracias por vuestro apoyo, tan importante y necesario en momentos tan duros.

Mi padre ya descansa tras largos años de enfermedad y muchos meses de sufrimiento. Se quedó plácidamente dormido, no sufrió y en estos dos días he podido despedirme de él tal y como quise hacerlo.

Gracias inmensas a todos los que de corazón me habéis reconfortado de diversas formas, todas igual de buenas; especialmente a Tere que nos acompañó durante toda la noche de velatorio.

He recibido mensajes preciosos, llenos de cariño y ánimo; cartas hermosísimas con idéntico contenido; llamadas telefónicas de quienes les era imposible acercarse a darnos un abrazo personalmente y la presencia en el tanatorio o en la despedida de todos los que quise y necesité ver; algunos de los cuales tuvieron que hacer muchos kilómetros para despedirlo.

A todos, -y pido perdón si olvido mencionar a alguien en esta carta- de corazón enormes gracias por hacerme sentir vuestro cariño. Gracias en mi nombre y en el de mi familia.

Sigo fuerte, tan fuerte como me veis o me oís. Mi padre me da esa fuerza porque sé que desde ahora nunca se separará de mi lado.

Estoy segura que voy a echar de menos su presencia física y en muchos momentos me faltará ver su cara y su sonrisa; un apretón de su mano o escucharle lo que tantas veces me decía: “Mi hija, es la mejor y la más lista” y ese “¡Te quiero hija!” que me decía casi con ansia.

Voy a pensar en él con serenidad para que no me vea sufrir por su ausencia.

Poco a poco voy a contar las cosas buenas –muchas- que aprendí de mi padre para compartirlas con vosotros.

Era el alma de la fiesta, el mejor cuenta chistes en las reuniones, amigo de sus amigos, falto por completo de enemigos porque jamás los tuvo.

Quiero hacerle vivir con mis palabras, seguir la senda de sus pasos y hacer que nadie olvide que Antonio “El Sebo”, fue el mejor alaejano, el mejor hijo, hermano, esposo, padre, suegro… el más adorable yayete y si su enfermedad no le hubiera arrebatado su mente, el mejor bisabuelo del mundo.

Se sentía muy orgulloso de mi hermano – su único hijo varón- que además del nombre, heredó de mi padre el gracejo y espontaneidad para ver la vida; y el amor por el trabajo y por hacer las cosas tal y como le salían del alma.

Verdadero orgullo de padre sentía por sus dos yernos -mi cuñada y mi marido-
Ganándose de ellos extraordinario cariño.
 
Quería muchísimo a sus primos, hermanos y cuñados, especialmente a Chus, por quien sentía un cariño especial.
Amaba a todos y cada uno de sus muchos sobrinos; sobre todo a su ahijada Charito, a la que adoraba -y ella a él- y a Felisina, Toña, Miguel, Juanita...

Supo agradecer los cuidados que en los últimos tiempos –ya con la enfermedad muy acentuada- le dispensó Pili, queriéndola como a una hija más; y la compañía que él y mi madre han tenido de sus primas, especialmente Filo y la tía María, que muy a su pesar, después de compartir tantas vivencias no pudo acompañarle en su último viaje.
Mis hijas no podían haber tenido un yayo mejor, al que recordarán siempre y al que querían en exacta medida que él a ellas.

Especial hincapié pongo en el amor que desde los trece años le profesó a mi madre -su mujer- que abnegada le cuidó primorosamente hasta el límite de sus fuerzas y ya sin ellas, sufrió tanto al tener que dejarlo en una residencia donde ha pasado sus últimos dos días de vida y donde dejó el último aliento mi querido padre.

Ha sido muy dura la despedida, como dura es la vida en tantas ocasiones, pero me quedo con todo lo bueno y trataré de olvidar pronto su enfermedad y por culpa de ella su deterioro físico.

Sabiendo que siempre fui "la niña de sus ojos", me ha dejado llena de su amor, su sentido del humor; su grandeza como ser humano, su valentía y su fuerza.

Recordaré a mi padre joven, fuerte, sano y musculoso, pero sobre todo, le recordaré  como lo que ha sido… EL MEJOR PADRE DEL MUNDO.

Por  lo antes mencionado, muchísimas gracias a todos vosotros; y a él: gracias a la vida por permitirme ser tu hija.

Te quiero Sebito.

Esta es la última foto que le tomé a mi padre en Diciembre pasado.

BIENVENIDOS...

... A este Blog creado para difundir noticias e historias de mi pueblo. Espero que encontréis aquí lo que andabais buscando. Si no es así y creéis que puedo ayudaros a conseguirlo, dejad la pregunta en un comentario, y a la mayor brevedad será atendido. Gracias por venir.